50 Frases para matar una idea

ImagenNos ha tocado vivir un momento histórico diferente, donde hay que agudizar el ingenio y dejar rienda suelta a nuestra creatividad… ¿Acaso tienes alguna IDEA? Pues indaga, creete merecedor de intentarlo y protégete de aquellos que intenten desalentarte. Si tú lo has visto ya significa que existe, que de algún modo ya se ha materializado.

Es tu idea y tiene valor, así que ojo con los miedos ajenos, con aquellas frases que puedan llegar a ti y que traten de quitarle fuerza a tu propósito. Si ellos no lo ven es su asunto, el tuyo es otro.

En los años 80, Dave Dufour acuñó una lista de sencillas frases capaces de acabar de un plumazo con cualquier idea. ¿Quien no ha oído alguna vez una sola de estas frases?.

1. En nuestro caso es diferente.

2. Ya lo hemos intentado antes.

3. Cuesta mucho.

4. No es mi trabajo.

5. Estamos demasiado ocupados para eso.

6. No tenemos tiempo.

7. No tenemos suficiente ayuda o gente para hacerlo.

8. Es un cambio demasiado radical.

9. A la gente no le va a gustar.

10. Va en contra de la política de la compañía.

11. Los sindicatos van a protestar.

12. Eso aumentará la burocracia.

13. No tenemos permiso.

14. Volvamos a la realidad.

15. No es nuestro problema.

16. No me gusta la idea.

17. No digo que no sea así, pero…

18. Vas adelantado dos años a tu tiempo.

19. Ahora no es el momento.

20. No está en el presupuesto.

21. A mi no me vas a enseñar nada nuevo.

22. Bien pensado, pero no es práctico.

23. Pensémoslo mejor.

24. Seremos el hazmerreir de la industria.

25. Otra vez eso no…

26. De dónde te has sacado eso?

27. Nos hemos arreglado perfectamente hasta ahora.

28. Nunca se ha intentado.

29. Pongamos eso como idea de baja prioridad.

30. Hagamos un comité.

31. En nuestro lugar no funcionaría.

32. El comité ejecutivo nunca lo aprobará.

33. No encuentro la relación.

34. Mejor consultarlo con la almohada.

35. No se puede hacer.

36. Es demasiado problema cambiar.

37. No da beneficios por sí solo.

38. Es imposible.

39. Conozco una persona que lo intentó y la despidieron.

40. Siempre lo hemos hecho así.

41. A la larga perderíamos dinero.

42. No tentemos a la suerte.

43. Ésto es lo que se puede esperar de un novato.

44. ¿Alguien lo ha intentado antes?.

45. Pensémoslo más detenidamente.

46. Tenemos que rendir cuentas a los accionistas.

47. No sueñes.

48. Si no está roto no es necesario arreglarlo.

49. Demasiado bonito para ser verdad.

50. Es demasiado trabajo.

¿Cómo llegar a ser Reina?

¿Cómo llegar a ser Reina?

 Si así lo crees, así será.

 Permítete serlo.

 Diseña tu reinado. Lo que equivale a:

 – Tus normas

– Tus derechos

– Tu escala de valores

– Tus creencias

– Mandamientos regios.

 Muéstralo todos los días (repasa tus mandamientos y cumple al menos uno al día)

Se comprensiva con todos aquellos plebeyos de alma que no son dignos de tu luz.

No te obligues a soportar nada, ni aguantar a nadie que no le plazca tu Corona.

La vida es un conjunto de experimentos (ensayo, error, ensayo, error, ensayo !solución!)

Honra tu luz.

Nunca te creas superior a nadie, ni tampoco inferior.

Di siempre tu verdad.

Las reinas no tienen miedo de estar solas, lo perdieron hace tiempo: por eso llegaron a reinas.

Lidera tu destino.

Detrás de toda Reina existe un alma fuerte que arriesga todo con tal de vivir su vida y alcanzar el destino de su corona.

Detrás de toda Reina hay un sueño de búsqueda eterna por cuya consecución es capaz hasta de empeñar la corona y enfrentarse a los demonios más oscuros.

Una Reina sabe que las personas tienen misiones, razones para estar en nuestras vidas, y, una vez concluidas, se van.

Unos se irán sin un adiós. Otros se largarán dando un portazo. Otros, en cambio, nos obsequiarán con flores en la despedida o celebrarán con champán haberse encontrado con nosotros. Unos nos verán, esto es, se darán cuenta de quienes somos más allá de la identidad personal. En cambio, otro jamás atisbarán ni un tímido rayo de luz de nuestra alma.

Una Reina cesada se va de viaje, procura reorganizar su vida, recoge remos y sigue adelante hacia su destino sin mirar atras.

Las Reinas no juegan con los sentimientos, ni aceptan que nadie juegue con los suyos.

Una Reina, no va de Reina. Simplemente es Reina.

Una Reina puede amar, pero en todo caso, se ama más a sí misma.

Una Reina se pregunta cada día cómo se siente. Y luego calibra si su deseo o ideal de bienestar interior coincide con su realidad.

Una Reina no teme preguntar.

Una Reina se atreve a mostrar lo que piensa y siente.

Una Reina asume sus miedos y aprende de sus errores.

Una Reina tiene vida propia.

UNA REINA ES UNA REINA

Extracto del libro «La reina que dio calabazas al caballero de la armadura oxidada»

De Rosetta Forner.